28 Dic Diferencias entre implantes salinos e implantes de silicona
La elección de los implantes a la hora de enfrentarse a una cirugía de aumento de pecho es algo que no hay que decidir a la ligera, y debe ser una elección tomada junto al cirujano. Los más habituales en estas intervenciones son los implantes salinos y los implantes de silicona, pero, a la hora de tomar la decisión, a los pacientes les suelen surgir algunas dudas, como por ejemplo cuál es la diferencia entre ambos implantes, qué riesgos conllevan o qué pasa si se rompen los implantes.
Implantes salinos y de silicona: ¿Cuál es la diferencia?
Los implantes de silicona y los salinos están recubiertos por el mismo material; en ambos casos de silicona, ya sea con una lámina unicapa o multicapa. Por lo que el material que está en contacto con nuestro cuerpo es, en los dos casos, el mismo: la silicona.
La diferencia de estos implantes es concretamente el material que contienen y su consistencia. Por un lado, los implantes salinos se llenan de suero fisiológico salino estéril, es decir, un producto similar al empleado en los goteros. En este caso se necesita una incisión más pequeña que la que se precisa con los implantes de silicona, puesto que en el caso de los implantes salinos se insertan vacíos en la zona del pecho para, posteriormente, rellenarse con el suero salino una vez colocados en la posición deseada. Estos implantes tienen un tacto uniforme y firme, y en algunos casos pueden perder algo de volumen con el tiempo.
Por otro lado, los implantes de silicona están formados por gel de silicona de uso médico. En este caso los implantes están ya conformados con el gel de silicona (material cohesivo que imita la densidad del tejido mamario). Este implante, a diferencia de los salinos, tienen un tacto más natural.
¿Qué pasa si los implantes se rompen?
Esta es una de las dudas sobre implantes más generalizada. En caso de que se rompa un implante salino, el propio cuerpo absorbe el contenido, quedando tan sólo la cubierta. Puesto que se trata de un líquido, si el implante se rompe, se nota de manera inmediata ya que el implante de desinfla. Este líquido salino no supone ningún riesgo para la salud; no obstante, se debe realizar una cirugía para extraer la cápsula de silicona y colocar, si el paciente quiere, un implante nuevo.
Por el contrario, cuando se rompe uno de los implantes de silicona es probable que la paciente no llegue a darse cuenta, o por lo menos no de manera inmediata a diferencia de la ruptura de los implantes salinos. Esto es debido a que la silicona cohesiva empleada en los implantes actuales no se dispersa, tiende a mantener su forma y a permanecer retenida en la cápsula que se forma alrededor de los implantes. Pese a ello, una rotura de los implantes de silicona puede generar molestias o cambios en la forma del pecho.
Por tanto, si la elección final es la de los implantes de silicona, es aconsejable realizar controles de forma periódica con el cirujano que le haya tratado, asegurando de esta manera que los implantes se encuentren en perfecto estado.
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